miércoles, 19 de octubre de 2011

El paradigma de Juana Colón



( foto cortesía de abeyno.wordpress.com)


Este artículo fue publicado por la periodista y profesora Norma Valle Ferrer para el periódico El Vocero de Puerto Rico

Con esa triste orfandad de paradigmas que emular que teníamos las juventudes de los setenta (1970) en Puerto Rico, echamos mano de una Juana Colón, negra, agitadora y lideresa obrera de Comerío. Se dijo entonces que tal vez era tabaquera, despalilladora para más señas. Su rostro se plasmó en un afiche negro y rojo, y de ahí en adelante se convirtió en mito. El pasado Día del Trabajo, mientras mucha gente celebraba el día feriado, tuve el privilegio de aprender sobre Juana Colón, la de verdad, la lideresa obrera, activista de los derechos de los trabajadores y trabajadoras, contra quien agentes de la Policía dispararon repetidamente durante una huelga en el 1919.

Juana Colón no fue tabaquera en las fábricasde la Puerto Rico Leaf Tobacco Company, ubicadas en la cuenca del Río de la Plata en Comerío, sino lavandera y planchadora para casas de familias pudientes. El profesor Wilson Torres Rosario, maestro de Historia de la escuela superior Juana Colón de Comerío, por fin le da forma concreta a la historia de esta mujer luchadora, cuya investigación exhaustiva ha realizado en archivos y hemerotecas del país. (“Juana Colón: combatiente en el tabacal puertorriqueño”). Aunque no fue tabaquera, Juana se vinculó, por solidaridad, a las luchas de los obreros y obreras del tabaco que formaban una legión en el Comerío de la primera mitad del siglo 20. Juana fue militante de la Federación Libre de Trabajadores (FLT) y el Partido Socialista (PS), ambas organizaciones dirigidas principalmente por Santiago Iglesias Pantín.

Descrita como una oradora carismática de las tribunas políticas y obreras, Juana Colón le añade a sus funciones públicas, las privadas, como madre de siete hijos e hijas, hermana devota y principalmente, doctora de barrio en las artes antiguas de santiguar, dar sobos y tés de plantas medicinales. Una anécdota rescatada de su historia cuenta como se empato a luchar con un marido agresor y, sin recursos, se separó de el para echar en paz a su familia hacia adelante. Aprender la historia de Juana Colón es adentrarse en la vida de cientos de mujeres y niñas cuyas vidas estaban casi exclusivamente dedicadas al trabajo duro en la casa y en el taller. El censo de 1910 en Comerío refleja que la mayoría de las trabajadoras tenía entre 10 y 20 años de edad.

Conocemos hoy a Juana Colón porque su imagen de oradora magnética permaneció en el recuerdo de muchos de sus congéneres, lo que permite al investigador rescatar su vida en la historia oral y en la Prensa. Sin embargo, Juana es ejemplo de las mujeres de su época que lucharon por adelantar su condición como mujeres y como puertorriqueñas. Al igual que Luisa Capetillo, Franca de Armiño y Concha Torres, por mencionar solo algunas, esta mujer luchadora es, y debe ser, paradigma para las mujeres y hombres del Puerto Rico de hoy.

3 comentarios:

  1. Dios bendiga todo aqel que guarde la memoria de mi amada tia mi nonbre es manuel a colon hoy endia evangelista del Senor

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    1. La madre de mi abuela se llamo juanita colon mi abuela era de cuales. Y se llamo Ramona colon el padre de mi abuela fue iguineo vazquez

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  2. Mujer digna de admirar y emular, son muchas como ella que hicieron historia hoy desconocida, como; Agustina Guffain, Tomasita Pastor, Paca Martinez,Guillermina Massanet, Rosario Belber entre otras.

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